Si uno se da un paseo por el metro o el autobús probablemente se encuentre con mucha gente mirando al móvil o quizás leyendo en un lector de e-books. Los periódicos y los libros en papel escasean, pero puede que un curioso formato ayude a volver a leer los libros impresos de toda la vida.
La idea la han aprovechado recientemente en la editorial Penguien Random House, que para convencer a sus lectores más jóvenes de las virtudes de este formato han creado los llamados "Penguin Minis", unos libros que ocupan lo que un iPhone SE y se leen de arriba hacia abajo. El formato es sorprendente, y puede que precisamente por eso tenga tanto sentido.
Más compactos pero igual de entretenidos
Los libros miden 12 x 8 cm, lo que los convierte en productos muy compactos, algo más anchos que un móvil convencional pero desde luego muy inferiores por ejemplo en altura a los modernos smartphones con pantallas casi sin marcos.

La idea no es nueva, y se basa en un formato muy popular en Holanda con los libros conocidos como Dwarsliggers. El diseño, creado en 2009 por la empresa Jongbloed BV, ha servido para publicar ya 350 títulos con este formato, y ahora la gigantesca editorial norteamericana ha querido aprovechar la idea para algunos títulos de su propia colección.
Este diseño permite que por ejemplo el peso también se reduzca. La edición mini de "The Fault in Our Stars" pesa 120 gramos por los 360 gramos de la edición de tapa blanda o los 454 gramos de la edición de tapa dura. Las tipografías utilizadas no cambian aunque el papel utilizado es el conocido papel biblia, y quienes lo pruebas parecen afirmar que no cuesta nada acostumbrarse a leer y pasar las páginas de esa forma tan peculiar.
El formato está pensado para ese lector que está con frecuencia en movimiento, y aunque los libros electrónicos o los móviles siguen al alza, puede que el amor por el papel de muchos lectores acabe convenciéndoles de que esta es una buena alternativa para disfrutar de la lectura de una forma curiosa y hasta divertida.
Una iniciativa que no caló en España
De este formato ya hablaba Bernat Ruiz Domènech en 2012 analizando un fenómeno que habían sido también aprovechados por editoriales fuera de Holanda. Ediciones B lo trajo a España con el nombre de "librinos", mientras que a Francia llegaron como "Point Deux" por La Martinière y en el Reino Unido la editora Hodder & Stoughton les llamó Flipback.

El formato es licenciado por Jongbloed, lo que permite a las editoriales modificar las portadas y por supuesto el texto, pero la producción corre a cargo del grupo editorial holandés.
El interés por ese formato no parece haber sido notable en nuestro páis: en 2012 Ruiz Domenèch hablaba de cómo la propia Ediciones B no se había tomado "muy en serio" el fomato, y ya entonces era difícil encontrar ejemplares en este formato. El precio, similar al de las ediciones convencionales, no era tampoco un aliciente en aquel momento.
Que Penguin House haya querido aprovechar ahora la idea sirve como nuevo caldo de cultivo para un concepto que desde luego es interesante para los usuarios. Veremos si dicho formato acaba cuajando, y si eso hace que vuelva a utilizarse en grupos editoriales en otras partes del mundo.
Imagen | The New York Times Vía | Quartz
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juaner
Dependerá sobre todo del precio al que los vendan. Si es razonable, es probable que tenga cierto éxito. Pero si la edición normal vale 20 y la mini 15, se los comerán con patatas.
Usuario desactivado
Y que tiene eso de cómodo si lo comparamos con leerlo en un libro electrónico? Soy un lector voraz y hace muchos años que no compro un libro en papel. La mayoría de la gente que me cuenta que prefiere leer en papel lo que prefiere es no leer a secas, mucho postureo es lo que hay con el formato papel (aunque es verdad que para estudiar sigue siendo mejor). Además a los que valoramos el minimalismo en casa, el no tener las paredes forradas de libros es una ventaja.
pruebarana1
"... y se leen de arriba hacia abajo."
Jooo, toda la vida leyendo de abajo hacia arriba, y de derecha a izquierda, y van y me lo cambian, me han destrozado.
Vamos, que el libro se gira 90% para leerlo en apaisado, pero se sigue leyendo igual, de izquierda a derecha y de arriba hacia abajo.
nonabol
Los amantes de los libros clásicos seguiran con sus tapas duras de coleccion...y para libros de batalla, tienes el ebook.
whisper5
En los años 90 tuvo un enorme éxito una iniciativa de libros pequeños llamada Alianza Cien:
https://elpais.com/diario/1995/11/22/cultura/816994805_850215.html
r a g n o r
Jongbloed parece el nombre de una asociación de juventudes nazi.
Bacon.exe
Son super cuquis
tony.fernandez.7568
No entiendo el tacañismo de los lectores. Un buen libro puede darte de 50-100 horas de entretenimiento y eso tiene que ser “gratis”. Una cancion cuesta 0,99€ y merece la pena comprarla cuando dura 3 minutos.
Pero si un libro vsle en epub 0,99 ah, no es muy caro.
Esta mentalidad tiene a los escritores trabajando de camareros, o cualquier cosa que les de para comer. Como si escribir no fuera costoso... lo que vais a conseguir es que no haya libros nuevos. Pero claro direis: total nuncs podré leer todos lo que han escrito hasta hoy..
israel moya
y eso es mas comodo? pues creo que va ha ser que no.
israel moya
y eso es mas comodo? pues creo que va ha ser que no.
asi6
yo veo el problema con el papel biblia, me parece muy delicado y especialmente si están pensados para leerlos "en movilidad". Será muy fácil rasgarlo.
Por otro lado mis temores se confirman al ver las fotos: el papel es transparente ¿eso es más cómodo para leer? No.
genebrandomerino
¿y para que voy a comprar nada si está practicamente todo gratis en epub o mobi por ahí? ya pague por un ereader en su dia y lo he amortizado con creces
la editorial planeta que haga dinero con la tele de basura que nos pone, con mi dinero se acabó